Ayer era un bebé...
... y desde hoy, va a ser una mujer casada.
Todavía recuerdo cómo era la primera vez que la ví, a través de un cristal (no me dejaron tocarla), tan pequeña, tan inconcebiblemente pequeña.
¿Cómo es que una criatura tan pequeña puede cambiar tanto la vida de otra gente?
Creció con toda la gracia que yo no tuve, pero fue bueno verla hacerlo. Supongo (no lo sé de cierto) que se supo adorada desde un principio, por hordas y hordas que, como si de la Bella Durmiente se tratara, llegaban a visitarla, algunos de lugares muy lejanos.
Cosa curiosa, ahora soy yo, quien viene de un país muy lejano.
¿La verdad? No sé cómo me siento. Estoy muy contento por ella, claro, como es natural. Pero luego siento que eso es exactamente lo que se espera que uno sienta y no sé, entonces, si es realmente lo que siento.
No lo sé, no lo sé: es como estar ante una galería de espejos y buscar desesperadamente llegar al final de la misma.
Esta noche, participaré de la ceremonia, veré cómo ella, que ayer era un bebé, se convierte en una mujer casada.
Y que Dios nos guarde a todos.
Comentarios
Bodas: infinidad de comida y alcohol gratis! ¿qué te vas a poner? Ay, fotos!
Más allá de lo que se espere que sientas, espero que tú sientas, en el fondo, lo que quieras sentir. Y también espero que ella sea feliz, por supuesto.
Un beso
P.
Felicidades a la novia. Un beso para ti.
Saludos