De millonarios excéntricos
Había una vez un millonario excéntrico, cuya principal obsesión era el sexo.
Había hecho prácticamente de todo en su búsqueda del éxtasis total: se había untado menjurjes, había visitado burdeles en oriente, había copiado el Kama Sutra, etcétera... y siempre le contaba sus aventuras a un amigo suyo, que por lo regular, quedaba perplejo ante sus proezas.
-¡Por fin!- le dijo un día el milloneta al otro: -¡Encontré el mejor sexo de mi vida!
-¡Ah, caray! ¿De verdad?
-Sí, mira. Estaba yo el otro dá viendo el Animal Planet, y dijeron que el animal que mejor goza del sexo es el Cocodrilo del Nilo. Que su pareja puede gozar hasta de cinco orgasmos seguidos y él también. No quise quedarme con la duda; mandé comprar un Cocodrilo e hice la prueba. ¡Es verdad!
-¿C-con un C-c-coco...? ¡No te creo!
- Hombre, pues ven y mira...
Fueron juntos a la mansión del millonario excéntrico y una vez ahí, éste llevó a su amigo a una habitación donde, efectivamente, había un Cocodrilo tendido cuán largo en el lecho amatorio.
-¡Órale!
- Uy, uy,uy, nada más de verlo ya me dieron ganas... chécate esto.
De inmediato, el millonario se quitó la ropa y le saltó encima al Cocodrilo, aunque antes de comenzar el coito, tomó un garrote que había junto a la cama y le dió cinco, seis, siete garrotazos rápidamente para que éste perdiera el conocimiento y no lo atacara. Después, ya lacio, lacio y agorzomado el Cocodrilo, el hombre pudo hacer de él lo que quiso, por arriba, por abjo, por delante y por detrás, mientras su amigo contemplaba todo, atónito.
- Buf, puf, uf.... ¡qué bien estuvo esto!- dijo fascinado el ricacha, toda vez terminó. - Y tú qué, ¿te animas a probar?
El amigo lo miró, vacilante.
- Este... bueno. Pero nomás no me vayas a dar muy duro con el garrote...
Comentarios
jia jia jia
besos muchos @ las 2.