Con sabor a infancia

Hace calor.

Cuando yo era chico y hacía mucho calor, mi abuela María solía preparar, sin mayor motivo aparente, ésta sopa fría, para que nos pudiéramos refrescar. Muchas veces la preparaba a mediodía, antes de la comida, o si la tarde era particularmente calurosa, sacaba los sobrantes del refrigerador y nos lo daba a media tarde, en un vaso.

Desde siempre, el gazpacho para mí tiene sabor a infancia. Quizás otros asocien esa etapa con otros sabores y/o aromas: la sopita de fideos, la de letras, qué se yo.

Para mí, era el gazpacho.

No es muy tarde y no puedo pegar el ojo, así que voy a preparar un poco de ésto, suguiendo la receta de mi abuela -- que no es por que lo fuera, ¡pero era regia en la cocina! Hay muchos testimonios al respecto.

A continuación, la reproduzco:

Ingredientes para el gazpacho:

6 a 8 jitomates (tomates) bola grandes previamente pelados
2 o 3 bolillos duros, cortados en cubo (esto puede ser también una barra de pan)
--ojo: debe ser pan con un día de añejamiento-
½ taza de vinagre de vino
½ taza de aceite de oliva extravirgen
4 ó 5 cubos de hielo picados (estilo frappé)
sal y pimienta al gusto

Para la guarnición:

3 pepinos pelados y finamente picados

2 pimientos morrones verdes finamente picados

1 cebolla morada finamente picada

1 taza de chiles verdes picados (esto es opcional)
1 ½ taza de cubitos de pan previamente dorados en aceite de oliva (crotones).

Modo de hacerse:

En la licuadora se muele el jitomate con el pan remojado en el vinagre y se cuela cuidadosamente, cuando ya ha quedado uniforme. A la mezcla se añade el aceite de oliva y el hielo. Acto seguido, se refrigera; cuando esté bien frío se sazona con sal y pimienta; debe servirse acompañado por el resto de los ingredientes.

Modo de servir:

El gazpacho debe servirse bien frío, en platos soperos o en tazoncitos de cristal (como coctel) o incluso en vasos. La guarnición debe colocarse por separado para que cada comensal se sirva a su gusto la cebolla, los crotones, etcétera.

También se puede poner una aceitera y una vinagrera a la mano, para quien desee darle más aliño.

Ahí tienen, un trozo de mi tierna e irrecuperable.

Que aproveche.